martes, 27 de abril de 2010

La forma de querer tú...

Todos elegimos en nuestra vida una pasión, sea o no de forma consciente... Y esa pasión más que posiblemente nos acompaña, por desgracia o por fortuna, durante el resto de nuestros días.

La mía sigue siendo la de siempre, la que guió mis palabras, la que abrió y curó mis heridas en este minúsculo rincón escrito del universo: hermética, silenciosa, rabiosa o contenida... Por ahora, querida idiota, gaviota herida, sigues sin batir tus alas en libertad!

Más Pedro Salinas, compartido con esa pasión hace unos días, mientras pensaba aún que podía volar lejos, muy lejos, sin romperme las alas!

La forma de querer tú
es dejarme que te quiera.
El sí con que te me rindes
es el silencio. Tus besos
son ofrecerme los labios
para que los bese yo.
Jamás palabras, abrazos,
me dirán que tú existías,
que me quisiste: Jamás.
Me lo dicen hojas blancas,
mapas, augurios, teléfonos;
tú, no.
Y estoy abrazado a ti
sin preguntarte, de miedo
a que no sea verdad
que tú vives y me quieres.
Y estoy abrazado a ti
sin mirar y sin tocarte.
No vaya a ser que descubra
con preguntas, con caricias,
esa soledad inmensa
de quererte sólo yo.

6 comentarios:

noctambula46 dijo...

No te quepa la menor duda que la vida que vivimos es unica y exclusivamente la que cada uno de nosotros elegimos vivir...podemos dar queriendo ser correspondidos, o simplemente dar sin esperar nada a cambio. Las alas para volar y alcanzar nuestros ideales o nuestros sueños, no nos las corta nadie...somos nosotros mismos los que marcamos nuestro itinerario de vuelo. Saludos de noctambula46

mAlicia dijo...

Tienes toda la razón, noctámbula, somos nosotros mismos los que nos cortamos las alas... Pero es que a veces, querer sin recibir lo mismo de la otra persona se hace tan duro!

Un abrazo!!!

Unknown dijo...

Joé, qué suerte la vuestra!

Entonces, aplicando vuestra metodología, ¿las personas que estuvieron recluidas en campos de concentración lo eligieron así? ¿Los menores víctimas del maltrato lo eligen ellos mismos? ¿Los que sufren por sus miedos y desarrollan patologías eligen ser así?

Lo siento, pero no comparto vuestra opinión. Puedo llegar a admitir que somos uno de nuestros mayores enemigos, pero no que todo dependa de nosotros... Me niego a pensar que mi vida no es como deseo que sea porque yo me he cortado las alas... No.

En muchas cosas, quizás sí. Pero, precisamente, en otras tantas he cuidado mis alas, las he entrenado, he aprendido métodos de vuelo, etc., y ahora no soy yo la que me impide volar

Y con respecto a querer con o sin esperanzas de ser correspondido... A veces, esa correspondencia prometida no es suficiente o no es en la manera que la necesitas.

En fin, abrazos a las dos, que toy que me caigo.

Mi vida sin mi dijo...

De acuerdo con la Peli. ¿Paqué escribir nada con lo bien que lo expresa ella? Abrazos.

Anónimo dijo...

Hacía tiempo que no te dejaba un comentario, ya sabes, a veces siempre te falta tiempo. Te noto un poco melancólica, ¿no? Las bellas palabras del poema dejan un regusto amargo. Creo, como Malicia, que no todo depende de nosotros; pero si es cierto que a veces nos empeñamos en seguir un camino aunque sepamos que no nos conduce hacia donde nosotros queremos ir.
Un besote fuerte, ¡y ánimo!

mAlicia dijo...

La cosa va a días, querida Desira. A veces elegimos el mismo camino, y con frecuencia tropezamos con la misma piedra una y mil veces, pensando que somos capaces de verla. Al final, un día, antes o después, decidimos elegir otro sendero...

Un abrazo grande!!!!!!